Bloguero viejo

"Sería una presunción censurable querer entretener a otros con la historia íntima de mis lucubraciones, la cual tendría en verdad una importancia subjetiva (para mí), pero ninguna objetiva (válida para todos). Pero si esta atención sobre mí mismo y la percepción resultante de ella no es tan frecuente como para que sea exigible a todos, aún siendo una cosa necesaria y conveniente, entonces puede disculparse al menos esta molestia de entretener a los demás con las sensaciones particulares de uno."

Immanuel Kant, "El poder de las facultades afectivas".